La ceguera del amor...

Como mañana es el día de San Valentin, la entrada de hoy se la quiero dedicar a la persona que ocupa mi corazón, mis días...mi vida...

Siempre te pido que me cuentes ese cuento que tanto me gusta, ese que me contaste aquella vez, ese que nunca me quieres contar por miedo a desgastarlo...Aun tengo el "Vale por un cuento" que me regalaste hace casi un año recuerdas? No se porque nunca te parece un buen momento para que pueda usarlo!!! jajajaja

Pues hoy seré yo la que te lo cuente, hoy te refrescaré la memoria para que lo recuerdes...alomejor va con segundas, y el vale lo uso esta noche nunca se sabe!!! jajajaja

Gracias por hacerme la persona más feliz del mundo, no sólo el día de San Valentín, sino todos los días de mi vida...Gracias por estás ahí en los buenos y en los malos momentos, por ser mi amigo, mi confidente, mi profesor muchas veces...gracías por rellenar mis huecos vacíos, por intentar que las cosas malas del pasado se fueran limando, y por conseguir que ahora pueda recordar y mirar atrás con una sonrisa...Gracias por nuestro 23 de Agosto, el día más feliz de mi vida...gracias por ser como eres...y gracias por elegirme a mi...

Te dedico tú cuento mio!!! TQM

"Érase una vez...que las virtudes y los defectos no tenían nada que hacer, todavía no existían los humanos y era tal el aburrimiento que la locura empezó a exclamar como un torbellino:
-¡Venga, venga!, ¡vamos a jugar al escondite, que lo pasaremos muy bien! ¡Yo cuento!
Accedieron no de muy buena gana y la locura empezó a contar.
-¡Empiezo! 1-2-5-9-17-25-8....
La duda no sabía dónde esconderse; la envidia tampoco porque siempre le gustaban los sitios de los demás. La sensualidad se escondió sinuosa tras una hiedra trepadora, la pureza se escondió tras una nube y dejó un cielo nítido; la pasión se introdujo en un volcán, la amistad se escondió con ayuda,la ambición se subió a lo más alto que pudo con la ayuda de la confianza.
Así una a una fueron ocupando sus lugares excepto el amor que no sabía donde esconderse, no era fácil. Fue la envidia la que le propuso:
-¡Escóndete en el rosal!¡Ahí no te encontrará!
-¡No puedo esconderme en el rosal, me verá enseguida entre sus ramas! -dijo el amor.
-¡Pues métete debajo de su tierra! -volvió a decir la envidia y el amor accedió.
-¡85-90-96 y 100!, la locura dijo: ¡Ya voy!, ¡escondeos bien!.
A la primera que vio fue a la pereza que no tubo tiempo suficiente para esconderse. Después la duda, que estaba de un sitio a otro, la pasión que fue fácil de distinguir por sus llamaradas y descubrió a la sensualidad. La ambición fue detectada por la mentira que le dijo: ¡estoy aquí, en lo mas alto!. A la sinceridad no hizo falta buscarla, pues ella misma le contó donde estaba escondida.
Y así fue encontrando la locura a cada una de las virtudes y los defectos. Únicamente quedaba por encontrar el amor y por mas vueltas que daba, no era capaz de dar con él. La traición le dijo muy bajito:
-¡Está detrás del rosal!
-¡Pues no lo veo! -dijo la locura.
-¡Está debajo de la tierra! Volvió a susurrar la traición. ¡Toma este palo y pincha la tierra, ya verás como sale!.
Como una posesa, la locura empezó a pinchar la tierra diciendo:
-¡Toma, toma, ya verás como sales!.
Se empezaron a escuchar gritos de dolor y gemidos, y el amor salió de entre la tierra gritando:
-¿Por qué me haces esto? ¡Estábamos jugando, yo solo quería ser feliz jugando!.
La locura comprendió lo que había hecho al ver al amor con toda la cara ensangrentada.
-¡Yo no quería hacerte esto, yo no quería hacerte daño! -gemía la locura-¡Perdóname!. ¡De ahora en adelante no te abandonaré nunca, yo seré los ojos que has perdido!
Desde entonces los que han encontrado el amor en su camino, dicen que este es ciego, y que siempre va acompañado de la locura."