miércoles, 31 de agosto de 2011
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Ya estamos de nuevo con la vida normal. Vuelta al trabajo, a las cosas cotidianas del día a día, y en mi caso vuelta a los días de lluvia que caracterizaron mis tierras gallegas durante todo el verano. El único respiro que tuve de cielos grises, han sido estos nueve días en México, que me sentaron de maravilla, aunque os mentiría si no os dijera que me supieron a poco...
Ya sabéis por mis menciones habituales, que me encanta México. Me gusta su gente, sus paisajes, su historia, su naturaleza... Me encanta bañarme en esas aguas claras, llenas de corales, rodeada de tortugas, calamares, rayas y peces de colores que me deslumbran solo con recordarlos. México es mágico. Tiene todo lo que uno desea para pasar unas fantásticas vacaciones, tiene belleza, sol, playa pero también mucha cultura que ofrecer, y muchas enseñanzas que una carga siempre en su mochila para traer de vuelta a casa...
Siento México muy dentro, como algo que me quema, que me llama, que me atrae de forma espectacular. Esta fue mi segunda visita, y ya estoy pensando en una tercera, aunque a otra zona distinta como Acapulco, o Puerto Vallarta.
Os iré contando que vi estos días que anduve perdida, todos los lugares nuevos que vi, la gente que conocí, y las peripecias que una hace cuando sale de casa, porque tengo que reconocer que conmigo la aventura está garantizada!!
Me traje un morenito interesante para Coruña, y esta lluvia se niega a dejar que luzca el sol para que el tono permanezca, así que me tocará ir al solarium para ganar unos días extra y mantener el recuerdo del sol más fresco y vivo. Es triste, pero es lo que hay, no queda otra...
Tenga tantas ganas de escribir que ni os imaginais... En México me levantaba a las seis, seis y media de la mañana, me iba a la terracita de la habitación, me sentaba allí con mi portátil viendo amanecer y dejaba que las palabras brotasen solas a ver lo que salía... Ahora leo los textos y es puro sentimiento, me transmiten y me devuelven a esos momentos vividos, que ya no volverán pero sin duda permanecerán para siempre en mi, como todas esas cosas bonitas que me suelo guardar para los momento malos, o para esos días tristes en los que no encuentro un poquito de luz...vida es lo que traigo dentro de esas letras, esperanza, ilusión, deseos, y sueños de futuro... que si me dejáis, y si queréis podéis incluso formar parte de ellos si permanecéis a mi lado, como siempre hacéis, porque mal que os pese, ya habéis pasado a formar parte de mi querida familia bloguera, y sin vuestros comentarios, y sin vuestras visitas, nada de esto sería lo mismo, por lo tanto, aquí os dejo un saquito cargado de agradecimiento, y un apartado de comentarios deseando que me contéis que tal ha sido vuestro verano, los que os habéis ido, los que aun no, los que tuvisteis vacaciones pero no salisteis de viaje, y los que simplemente decidieron permanecer bajo una palmera disfrutando de un buen libro, o de algún amanecer tan maravilloso como los mios, al fin y al cabo, el sol que nos ilumina es el mismo en todas las partes del mundo no???... Contarme y dejarme que os cuente... Bienvenidos Cuentistas, empezamos otra etapa más en nuestras vidas? Quien se sube?
México en el recuerdo...
Ya estamos de nuevo con la vida normal. Vuelta al trabajo, a las cosas cotidianas del día a día, y en mi caso vuelta a los días de lluvia que caracterizaron mis tierras gallegas durante todo el verano. El único respiro que tuve de cielos grises, han sido estos nueve días en México, que me sentaron de maravilla, aunque os mentiría si no os dijera que me supieron a poco...
Ya sabéis por mis menciones habituales, que me encanta México. Me gusta su gente, sus paisajes, su historia, su naturaleza... Me encanta bañarme en esas aguas claras, llenas de corales, rodeada de tortugas, calamares, rayas y peces de colores que me deslumbran solo con recordarlos. México es mágico. Tiene todo lo que uno desea para pasar unas fantásticas vacaciones, tiene belleza, sol, playa pero también mucha cultura que ofrecer, y muchas enseñanzas que una carga siempre en su mochila para traer de vuelta a casa...
Siento México muy dentro, como algo que me quema, que me llama, que me atrae de forma espectacular. Esta fue mi segunda visita, y ya estoy pensando en una tercera, aunque a otra zona distinta como Acapulco, o Puerto Vallarta.
Os iré contando que vi estos días que anduve perdida, todos los lugares nuevos que vi, la gente que conocí, y las peripecias que una hace cuando sale de casa, porque tengo que reconocer que conmigo la aventura está garantizada!!
Me traje un morenito interesante para Coruña, y esta lluvia se niega a dejar que luzca el sol para que el tono permanezca, así que me tocará ir al solarium para ganar unos días extra y mantener el recuerdo del sol más fresco y vivo. Es triste, pero es lo que hay, no queda otra...
Tenga tantas ganas de escribir que ni os imaginais... En México me levantaba a las seis, seis y media de la mañana, me iba a la terracita de la habitación, me sentaba allí con mi portátil viendo amanecer y dejaba que las palabras brotasen solas a ver lo que salía... Ahora leo los textos y es puro sentimiento, me transmiten y me devuelven a esos momentos vividos, que ya no volverán pero sin duda permanecerán para siempre en mi, como todas esas cosas bonitas que me suelo guardar para los momento malos, o para esos días tristes en los que no encuentro un poquito de luz...vida es lo que traigo dentro de esas letras, esperanza, ilusión, deseos, y sueños de futuro... que si me dejáis, y si queréis podéis incluso formar parte de ellos si permanecéis a mi lado, como siempre hacéis, porque mal que os pese, ya habéis pasado a formar parte de mi querida familia bloguera, y sin vuestros comentarios, y sin vuestras visitas, nada de esto sería lo mismo, por lo tanto, aquí os dejo un saquito cargado de agradecimiento, y un apartado de comentarios deseando que me contéis que tal ha sido vuestro verano, los que os habéis ido, los que aun no, los que tuvisteis vacaciones pero no salisteis de viaje, y los que simplemente decidieron permanecer bajo una palmera disfrutando de un buen libro, o de algún amanecer tan maravilloso como los mios, al fin y al cabo, el sol que nos ilumina es el mismo en todas las partes del mundo no???... Contarme y dejarme que os cuente... Bienvenidos Cuentistas, empezamos otra etapa más en nuestras vidas? Quien se sube?
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Hola Marta, qué bonita entrada, no hay nada como los recuerdos para traer a la memoria momentos vividos, y evocar, y recordar y saborear... eso es lo mejor, sin recuerdos la vida sería mucho menos interesante. Un abrazo y ahora que el día a día comienza ya a envolvernos recordemos momentos hermosos que nos hagan pensar en cosa agradables.
ResponderEliminarPor supuesto que me subo, me encanta formar parte de tu familia bloguera.
ResponderEliminarMi verano, este años, ha sido en el pueblo. Nos hicimos una casita allí y hemos estado montando muebles, la cocina que la compuse yo mismo, un botellero, colgando mis cosas antiguas, baños, siesta y demás. Han sido unas vacaciones tranquilas, pensaba que iba a echar de menos la playa pero no me ha dado tiempo.
Me alegra que lo hayas pasado bien, piensa que ya queda menos para las del año que viene. Un besito y me encanta tenerte por aquí otra vez.
Rose, ahora es lo que nos queda, vivir un poco de todos estos recuerdos esperando a las siguientes vacaiones no?? jajaja Un besote guapa!
ResponderEliminarHola David!!! Pues ya ves que me encantó el viaje, pero las próximas vacaciones en mi caso, son este año, que aun me quedan 15 días y algo haré seguro!!! Yo estoy esperando por esas fotos de tu casita idilica que nos prometiste eh!! Me alegro que te lo pasaras bien, pero sobre todo que desconectaras y descansaras... Un besazo!!!
Yo me subo al carro, a tú carro, a tu vida y a tu familia bloguera.
ResponderEliminarMe ha encantado la entrada, aunque esto no es nada nuevo.
Estoy deseando leer todo lo que nos tienes que contar.
Mil besitos